Se realiza un modelo de la zona de análisis. El modelado tridimensional de la zona en general y de la parcela bajo estudio en particular, incluyendo a los focos ruidosos caracterizados mediante medidas “in situ”, se ha basado en la documentación recopilada de la propia empresa, de planos obtenidos en medios públicos cómo Google Earth y de reconocimiento “in situ”. Con las fuentes ubicadas en el modelo se definen los materiales de los distintos paramentos y se determinan las características acústicas de los mismos (aislamiento, absorción, difracción, etc.). Tras introducir todos los datos necesarios en el programa de simulación se analiza el campo sonoro resultante. Una vez ajustado el modelo, se estudian las distintas soluciones de tratamiento acústico y se procede a la simulación de estas. Se ha alcanzado el nivel de detalle suficiente para lograr el objeto perseguido.
Se describen una serie de sistemas de aislamiento acústico a partir de pantallas acústicas para mejorar la situación actual y cumplir con valores límite en el perímetro de la planta.